• Mejora la simetría facial: Se equilibran las proporciones del rostro.
• Rejuvenece la apariencia: Reduce las arrugas y líneas de expresión.
• Aumenta el volumen en zonas específicas: Realza pómulos, labios y mentón.
• Mejora el contorno facial: Define los óvalos y ángulos del rostro.
• Aumenta la autoestima: Te sentirás más seguro y atractivo.

La elección de los procedimientos dependerá de tus necesidades y objetivos. El especialista te asesorará sobre las mejores opciones para ti.

• Profesional cualificado: Es fundamental acudir a un especialista con trayectoria en medicina estética con amplia experiencia en tratamientos faciales.
• Evaluación personalizada: realizamos una evaluación detallada de tu rostro para determinar tus necesidades y expectativas.
• Realismo en los resultados: Los tratamientos estéticos pueden mejorar significativamente tu apariencia, pero es importante tener expectativas realistas.
• Salud general: Asegúrate de estar en buen estado de salud antes de someterte a cualquier procedimiento.

La armonización facial es un tratamiento personalizado que combina diferentes procedimientos para lograr un resultado óptimo.

Los tratamientos más comunes incluyen:

• Rellenos dérmicos: Se utilizan para aumentar el volumen en zonas como pómulos, labios, mentón y surcos nasogenianos.
• Bioestimuladores: para mejorar contorno facial y flacidez cutánea.
• Toxina botulínica: Se aplica para relajar los músculos faciales y suavizar las arrugas dinámicas, como las líneas de expresión.
• Rinomodelación: Modificación de la forma de la nariz sin cirugía.